Mi familia y yo estamos agradecidos por pensar en asociarse con nuestro ministerio. La iglesia del Señor necesita a hombres y mujeres de integridad, un pueblo que entre en una relación de pacto con Dios y nuestro esfuerzo ministerial. Nunca hemos tomado esa relación de pacto a la ligera. Es el compromiso y las donaciones de nuestros socios lo que asegura que podemos llevar el Evangelio de Jesucristo a las partes más remotas del mundo. Estamos muy agradecidos por nuestra relación con estos pilares, partidarios y amigos del ministerio.

 

Este pacto o asociación no es un evento de una sola vez. Es un compromiso creciente y próspero en el que ambos compartimos los beneficios que se nos prometieron cuando nos unimos y difundimos la causa de Cristo y el Reino de Dios. Al asociarte con nosotros, se distinguirá como alguien comprometido con nuestro ministerio y alguien que comparte su visión para salvar a los perdidos, ayudar a los heridos y difundir el Evangelio. Una vez sellado nuestro pacto te enviaremos un paquete de bienvenida, que incluye algunos recursos. En la medida que crecemos juntos espiritualmente, quiero que veas de dónde venimos y hacia dónde Dios nos está llevando.

 

No tengo la menor duda, que juntos, podemos impactar el mundo y lograr cosas maravillosas para la gloria de Dios. Recuerde, hay fuerza y ​​poder en la sociedad, y a medida que este ministerio crezca, tú también crecerás. De nuevo, gracias por considerar asociarte y sembrar en este ministerio.

 

Tu consiervo,

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Edgar Trinidad